jueves, 17 de septiembre de 2015

Continuando con las aportaciones al Blog, éste es el resultado a un Concurso de Creación de historietas Electrónicas con los compañeros y compañeras del 2do Año. Felicitaciones a Cynthia Pinchi y Brunela Chong.


Dale un clic en el enlace de abajo para ver la Historieta completa


Autora: Cynthia V, Pinchi M. 2° "C"
1° Puesto
Historieta creada en base a la Leyenda del Chullachaqui,
personaje de nuestra región, que es como un duende burlón
 y toma la apariencia de alguien conocido de la victima
para engañarlo e internarlo en el bosque.


Dale un clic en el enlace de abajo para ver la Historieta completa


Autora: Brunela Chong 2° "C"
2° Puesto
Historieta basada en la Leyenda de la Lamparilla, 
donde un par de jóvenes turistas desafían los misterios de nuestra selva, 
con consecuencias fatales.

jueves, 30 de julio de 2015



Al Washo lo conocemos todos, pero de él muchos sabemos muy poco, entre otras cosas que su verdadero nombre es Waldemar Contreras Guerrero y que ya supera los 40 años. “Washo” es casi una estampa local en esa ciudad, y es conocido por la costumbre de recorrer todo y cuanto velorio se lleve a cabo en nuestra ciudad.
Según los tarapotinos, el Washo era desde muy pequeño un muchacho dado a las artes de vagabundear por toda la ciudad y a disfrutar de una que otra comida gratuita en los velorios por los que pasaba a pensionar cuando el hambre tocaba. Andaba el Washo por los alrededores, cuando la muerte sorprendió a su padre quien sufría de una enfermedad terca, por lo que le había pedido a Washo que permaneciese en casa por si la parca venía de visita uno de esos días para llevar su alma a pastar en los campos de otro mundo. Como cumplidor fiel de los augurios el Washo se hizo el loco – sin ironía- y decidió como siempre echarse al camino, sorprendiendo la muerte al padre, cuando el Washo se encontraba disfrutando de un propicio “quinientin” (aguardiente) al amparo del velorio de turno, a 50 Kilometros del lecho en que su padre soltaba su último suspiro. Se dice que al viejo le quedó grabado en el alma el dolor de irse de este mundo sin que a su hijo le haya importado su muerte. 

           

Si se dirige a un velorio, en el camino va anunciando a todo el que encuentra en la calle quien era la o el muerto, como se murió, y familia de quién era, porque así como al Washo lo conocen todos, él también conoce a todos en Tarapoto.

En un velorio, el Washo se encontraba sentado junto a una dama de unos 40 años, hija de la finada y que había venido desde la capital para las exequias de su señora madre, cuando este empezó a inquirir por la edad de la fallecida. La señora haciendo un exagerado gesto de desagrado, he impostando un acento limeño dijo: “hay que feo, “yevense” a este loco de aquí”, pero el Washo, seguía preguntado: ¿Señora, cuantos años tenía la finadita? Y volvió a insistir dos o tres veces más, hasta que la señora estalló para poner en su lugar al igualado:

-¡Fastidio! ¡Tenía cien años! 

Ah –replicó el Washo con su chispeante acento selvático- “jovena” no más ha muerto esta “shepleca” (débil) ¿di? 

Como era de esperar, la ilustre dama se abalanzó sobre el orate con la convicción de hacerle tragar sus palabras y en el velorio estalló en un desorden colectivo.o.

No sabemos cuántos años más le quedan al Washo, para cargar esa curiosa cruz de velorios, aguardiente y comida gratuita. Lo que sí sabemos es que en Tarapoto el único velorio en el que se extrañarán sus bromas y ocurrencias será el de él mismo, cuando se acabe la maldición del padre, en el velorio del "Rey de los velorios".


¿PUEDES COMENTAR ALGUNA ANÉCDOTA QUE TE PASO CON ÉSTE PERSONAJE?

Soy de la Selva, soy charapa, donde al caminar las sandalias suenan sha,sha,sha, que cuando estas se rompen les pones un clavito y vuelves a utilizarlas, que cuando juegas fulbito les utilizas como guantes de arquero; donde se come ¡paiche, Palometa, timbuche, Maduro asado, ractacara, tacacho con cecina o chorizo, mamaco, suri, chicharra!... ¡mmmm!, donde en cada esquina hay una señora aguajera, que te dice si quieres con sal o con azúcar, y te pregunta: ¿Te lo pelo joven? Y tu sin dudar le respondes ¡DE UNA VEZ!; donde la lluvia que suena ¡shooooooooooooooooo! y muchas veces arruina los planes, nos inunda y sube hasta las rodillas, y después hay que estar sacando el agua con balde, donde no se toca timbre porque se va de frente a la ventana y se dice: uuuuuhuuuu, donde en carnavales tenemos más colores que el arcoíris, donde todo es posible y donde todo simplemente es mejor, así como cuando te “HUICAPEAN” globos. Donde el "SI DI", "YA VUELTA", “AQUISITO NO MÁS” “ALLAWA”, son las frases más comunes para expresarse; donde las huambrillas manejan moto en minifalda (bueno no todas) y nos muestran toda su “agilidad”, las mujeres son hermosas, lindishcuritas, así como los paisajes y ríos; y ni que decir de los hombres! CHAMBEADORES, donde puedes comer Juane sentado en la vereda de tu casa, donde sacas una mecedora y una jarra de agua o en todo caso tu “CAFÉ DE OLLA” con su rosquita pero no de patrona y un trapo para ahuyentar a los zancudos, que puntualmente salen de 6 a 7 de la noche, ni un minuto ni un minuto menos; donde siempre hay una vecina chismosa que sabe toda tu vida, jajaja. Donde la gente es amable y humilde pues se saludan grandes y chicos: ¡hola mashita!... ¿Cómo estas ñaño?... ¡Si señores!, ¡Soy de la Selva...somos de la Selva!, el lugar más maravilloso donde se respira alegría y bondad.


Dime que frase selvática me olvide de colocar en este pequeño relato:

Al delfín rosado de los ríos de la selva, la gente lo llama, simplemente, bufeo colorado y así lo distingue de sus otros hermanos que son de color gris. La leyenda de que el bufeo, como ser o duende “encantado” que se, puede transformarse en un hombre “gringo” al que le gustan las mujeres jóvenes y bonitas. Así, con esa apariencia, suele presentarse a la fiesta en la que participa la chica elegida. Como viajero de paso, baila y enamora a la muchacha, invita a beber a todos los participantes y así se gana la simpatía general, pero él no come ni menos bebe licor, porque si se emborrachara, se rompería el encantamiento y se descubriría quién es.

Cuando la muchacha ya es la enamorada del bufeo, él la colma de regalos y atenciones. La visita siempre por las noches y se marcha antes del amanecer. Así, al poco tiempo, la mujer enamorada empieza a mostrar una conducta extraña, porque quiere permanecer todo el tiempo junto al río y si ésta situación no es notada a tiempo por sus familiares y no la mandan a curar con un buen chamán, puede terminar desapareciendo, ya que en su deseo de estar siempre junto a su gringo “bufeo” enamorado, terminará arrojándose al río para no salir jamás.

FUENTE: http://asiesloreto.blogspot.com/2015/06/leyendas-de-mi-region.html

PREGUNTA:
¿Los cuentos, mitos o leyendas de nuestra selva, contribuyen a preservar nuestra cultura regional?, ¿por qué?



El Prof. Ròger Sánchez Ruiz se iba a trabajar en la Escuela Primaria de San Roque de Cumbaza (Lamas) como Director, y le habían dicho: ”Profesor Sánchez, se va Ud. a reemplazar a un borracho y debe tener mucho cuidado”.
Y en el camino a dicha Escuela, le dio alcance una señora, quièn le dijo que iba al mismo lugar. Antes de llegar al pueblo, tenìan que pasar por el Trapiche de don Marden Ochoa en donde procesaba miel de caña, chancaca y el infaltable ventisho casha casha (aguardiente).



Profesor - le dijo su acompañante - quiero que me permita invitarle un poco de jugo de caña, le harà muy bien para este sofocante calor.
El Profesor Sánchez (Gasparìn) no se olvidaba de las enseñanzas de sus profesores:”Hay que saber contemporizar con la colectividad, participar de sus actividades y sus costumbres. Eso es lo que nos integra a la Comunidad”. Se sentò, y el primer pate (vasija) lo tomò de un solo empujòn.
- Don Marden- habló la señora- el profesor viene a trabajar en la Escuela como relevo del Prof. Manuel Delgado.
- No sabe, cuànto me alegra Profesor. decìa el dueño del trapiche.
- Ud. le va a enseñar a mi hijo, la verdad, que el Prof. Delgado es muy machaguay (borracho).Y como se llama Profesor.
- Ròger Sánchez Ruiz.
- Cuánto me alegra Profesor, no se por qué, pero tengo el pálpito de que con Ud. vamos a trabajar muy bien, Profesor.
- Así lo espero, Señor, pondré todo de mi parte para corresponder a la confianza de la Comunidad.
- Acépteme, Profesor que celebremos su llegada con otro ventishito.

Y los ventishitos iban y venían. ”Hay que saber contemporizar- era lo único que se acordaba Gasparìn. La señora se fue muy tranquila y don Marden se comprometió a acompañarle hasta la Escuela para que tome posesión de cargo.

El Profesor Ròger nunca fue un buen bebedor, era lo que se dice un ”cabeza de pollo”, tan pronto tomaba los primeros tragos, ya estaba enterrando el pico y se emborrachó hasta las patas.

Don Marden no tuvo mayores problemas para subirlo a su caballo y le aseguró las manos al aparejo y así como un Nazareno a caballo se lo llevó hasta la Escuela.
Los pobladores que le observaron atravesar por la Plaza se percataron de quién era el visitante.

¡Que salado es este pueblo! Comentò uno de ellos. Sale un Profesor borracho y lo reemplaza otro màs borracho todavía.
Al día siguiente, una gran cantidad de padres de familia se agolparon en la puerta de la Escuela y cuando el Director se dispuso a anunciar la llegada del nuevo Profesor, los Directivos de la APAFA se acercaron al Prof. Gasparìn y el que era el Presidente, le dijo:

         


-Profesor, ya tenemos mala experiencia con los borracho, asì que le pedimos con todo respeto y con todo cariño:”QUE SE VAYA”.

Carlos Velásquez Sànchez

FUENTE: http://cuentoshistoriasdelaselva.blogspot.com/search?updated-min=2009-01-01T00:00:00-08:00&updated-max=2010-01-01T00:00:00-08:00&max-results=15

PREGUNTA:

¿Cuál debió ser la actitud, qué el Profesor debió tomar antes de embriagarse?

lunes, 27 de julio de 2015




Cuenta la leyenda que una epidemia estaba acabando con la gente de una comunidad nativa. Que la madre de dos niños, sintiéndose con los primeros síntomas de la enfermedad, quiso salvar del mal a sus pequeños y entonces los llevó al monte, muy lejos y los dejó en ese lugar. Cerca de una linda quebrada, abundante en peces y árboles frutales. Con gran pena los dejó, sabiendo que no los volvería a ver más. Ellos jugaron, comieron frutos y se bañaron en la quebradita, pero ya en la noche sintieron la falta de su madre y partieron en su búsqueda pero se perdieron en el monte.


Asustados, llorando de pena decían cómo no ser aves para poder volar donde mamá. Y el dueño del monte tuvo pena y los convirtió en avecitas y ellos volaron, pero cuando llegaron a su pueblo vieron que ya nadie vivía, todos habían muerto. Desde entonces no dejan de volar y volar, y cuando se posan en lo alto de un árbol, cansados de buscar a su madre, hacen oír su canto lastimero ayaymamá... ayaymamá...
  
Otra versión de esta leyenda es:

La leyenda del Ayaymama, narra el abandono de dos niños en la selva tras perder a la mamá. La madrastra y el papá dejan a su suerte a los menores en la montaña simulando un paseo. Los niños se volvieron en pajaritos y en una noche de luna volaron hasta el techo de la casa de la madrastra y emitieron su canto:

Ayaymama, Huischuhuarca:

Nuestra madre ha muerto y nos abandonaron.

sábado, 25 de julio de 2015

LA LAMPARILLA




Su nombre deriva de su semejanza con una lámpara encendida. Aparece en horas avanzadas de la noche como un foco de luz tenue y rojizo. A veces fija a medio metro del suelo. Otras veces desplazándose en diversas direcciones pero a la misma altura. Quienes se acercan con la intención de cogerla se ven fuertemente impresionados cuando se transforma en figura de un hombre gigante vestido con túnica blanca que de a pocos se desvanece como neblina, dejando un olor desagradable y dañino que produce la enfermedad conocida como "mal aire".

Puede verse en lugares solitarios de la selva aunque antiguamente aparecía en la ciudad cuando no había alumbrado eléctrico y algunas calles eran como caminos con casas muy espaciadas.
Abundan los testimonios de quienes vieron a la "lamparilla" con una sensación de estremecimiento que crispa los nervios.

                                          


En Juanjui, cierta noche bien oscura, don Eduardo Peña Meza, regresaba de velar a una persona en una casa que estaba a unas seis cuadras de la suya, encontró una luz que parecía ser llevada por un hombre invisible.



Don Eduardo cambió inmediatamente de rumbo, tomando otra calle, porque no era posible aventurarse a pasar por ese lugar, ya que esa luz era la lamparilla, horrible fantasma de la selva.



Pero al llegar a la otra calle volvió a ver la luz a una cuadra de distancia, en el instante retorno a la calle anterior, pero la luz ya estaba allí con el propósito de impedirle el paso, ante esta situación, don Eduardo, se puso a meditar, si regresaba al velorio contaría lo sucedido y si no lo creyeran lo tomarían por cobarde, pero irse contra el fantasma era una aventura muy peligrosa.




Mientras reflexionaba así, la luz seguía alumbrando paseándose por la boca calle por donde debía pasar, desafiándole de esta forma. Don Eduardo tomo animo, cogió una cañabrava y siguió adelante, con paso resuelto, pero del mismo modo la luz venía a su encuentro, y muy cerca, los rayos luminosos le impedían ver al fantasma, pero sin perder tiempo, arremetió a golpes contra el fantasma, la lucha ya duraba casi diez minutos, sin que don Eduardo lograra alcanzar golpe alguno al maligno ser, mientras este daba vueltas vertiginosa a su alrededor.




Ansioso de dominar a su enemigo cuanto antes, don Eduardo asestaba golpes a diestra y siniestra, hasta que cansada la lamparilla abandono la pelea. Don Eduardo le persiguió infatigable, hasta que consiguió alcanzarle un tremendo golpe, viendo como consecuencia caer a la lamparilla y desaparecer la luz. Inmediatamente prendió un fósforo y solo encontró en el suelo un insecto de seis centímetros de largo por tres de diámetro, y no tenía alas, don Eduardo comenzó a despedazarle con el palo, pero antes de terminar se apagó el fósforo, cuando prendió otro fosforillo ya no encontró al insecto muerto, había desaparecido.




Es así que don Eduardo Peña Meza, mató, en Juanjui a la horrible Lamparilla, terror de los trasnochadores.



http://cuentoselvatico.blogspot.com/2011/08/la-lamparilla-cuento-selvatico.html

PREGUNTA:

1.- ¿Cuál es tu impresión del cuento?

sábado, 18 de julio de 2015


https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_gCOML4jVfyWsMd_Fs6dosRxWDWqhX3e-MUqnpO810Xqad6rGwlJsfT_De901p9zdgJ7Gqx8Vxx2UzJyuPoRPAULGea-22wCcCrglyd4zuxYuUjkCoofugoWonIKR6Cmgw-ea-4IJy2_N/s1600/runamula.jpg
En quechua “runa” significa gente, es decir Runamula quiere decir: mulagente. Según la creencia popular, la runamula es el alma de una mujer viva, pecadora, convertida en briosa mula por acción diabólica que sale a recorrer los caminos durante la noche, en castigo de sus pecados, mientras el cuerpo descansa dormido. 
Cuentan las personas que la vieron que corre velozmente botando llamaradas de fuego por el hocico.
Al despertar la mujer no recuerda nada, solo queda sobre su cuerpo las huellas del brutal castigo a que ha sido sometida mientras dormía sin que pueda explicar el porqué de las huellas.

http://4.bp.blogspot.com/-d1_n8wnrfoE/TwHcwOLdXDI/AAAAAAAAAA8/rzsLbvBEk14/s320/runamula.JPG

Muchos años atrás, la Selva estaba cubierta de muchos árboles grandes y majestuosos y los pobladores caminaban a su chacra por caminos de herradura que apenas podían pasar sus caballos con mucha carga y caminaban 3 a 5 horas para llegar a su destino, cierta vez uno de estos pobladores llamado Odilo se dirigía a su chacra que quedaba en un sitio llamado Sanango, por el camino a Aucaloma, estaba acompañado por sus hermanos Edwin y Edisa. Pasada la medianoche advirtieron el fuerte sonido de un relincho cerca de ellos, el cual les asustó – lo cual no era común ellos- acostumbrados a caminar por las noches por estos caminos, Al rato se escuchó un galopar que cada vez se oía más cerca, ellos aún más sorprendidos y asustados se escondieron detrás de una Lupuna y se pusieron a ñawinchear, lo que vieron les sorprendió aún más, era un animal que parecía un caballo o una mula  –porque no podían diferenciar-, de color marrón que despedía fuego por su hocico y venía relinchando acompañado por sonidos de cascabeles y el azotar de su jinete que pasó por delante de ellos y desapareció poco tiempo después.

http://www.pachiza.com/actualidad/padre-manuel-junto-a-la-runamula-en-el-parque-tematico-chullachaqui-tarapoto.jpg

Luego ellos continuaron su camino hasta su chacra y comenzaron sus faenas muy temprano.
Resulta que era la vecina Ruperta que hace años vive sola ya que su marido le abandonó y se fue a la petrolera y por esas cosas del tiempo ella busco el amor en otro hombre llamado Ishaco que por cosas del destino es casado; y también cuentan los vecinos que varias veces la vieron salir de la Iglesia del pueblo en horas de la madrugada, lo cual hacía sospechar que también convivía con el Cura.
Al promediar el mediodía, se vio a Ruperta pasear por las chacras vecinas todo adolorida y con huellas y moretones producto de los azotes sufridos; ella no recordaba nada y ni se imaginaba como lo había sucedido. Y con esto se comprobó que la Runamula más que una leyenda podría ser una Historia Real.

ODILO GONZÁLEZ RAMÍREZ


PREGUNTAS:

1.- ¿De dónde proviene el nombre de “Runamula”?

2.-¿Qué es Lupuna?


3.-¿Por qué se dice que eran árboles majestuosos?

martes, 14 de julio de 2015


https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDU0_uzDQ5AFVWCxJtnhYyL67nW8eyj4YikM34lyUITjR09foy-McEposcavS7Gbx6GGzoCU4fji08OfOg86sj5Hy_nCKenakomHiXbZH90AHuW4xVX2ctwXDDItx93ajo1RdwHkMgdp8-/s600/HISTORIA.jpg
Mi compadre Upshico acostumbraba internarse solo en el bosque en busca de cacería durante días con el fin de reunir abundante carne y pieles. Casi al final de este sendero en el bosque, había un colosal tronco caído, sobre el que tenía que pasar diariamente en la ida y venida. Hasta que un día de esos, que se detuvo junto al tronco para descansar, clavó el machete en el mismo tronco, en vez de hacerlo en el suelo y al instante sintió un ligero temblor que sacudió el bosque que le rodeaba, acompañado de un ruido sordo y lejano. Upshico se asustó, pensando que se trataba del inicio de un terremoto, pero todo se quietó y volvió a la normalidad y él siguió su descanso. 
Luego de un instante sintió un sacudón y vio que los árboles se movian, causando un ruido extraño como el que escuchó días antes y luego vino la calma. Upshico quedó pensativo, tenía la impresión de que el propio árbol en el que estaba sentado, se sacudía, pero no le dio importancia. 
http://media0.webgarden.es/images/media0:4bb212c41958e.jpg/anaconda.jpg
Se puso a  trochear, llegó a una parte totalmente despejada de malezas y arbustos, y vio sorprendido montones de huesos de todo tamaño, como si se tratara de un cementerio de animales de la selva. Upshico, luego avanzó para examinar las raíces del árbol caído, pero al acercarse donde terminaba éste, quedó paralizado al ver con asombro que en lugar de raíces había un enorme hueco, desde donde al parecer eran arrojados los huesos, porque desde allí partía el montón. El cazador sintió temor, al sospechar que el árbol caído no era tal, sino algo misterioso y viviente.
Allí permaneció largo rato, y de pronto vio llegar a un venado que se acercaba lentamente, entonces Upshico se preparó para disparar al animal, pero de pronto apareció sorpresivamente una enorme sachavaca y fue a detenerse junto al venado. Upshico, quedó desconcertado, no sabía a cuál de los dos matar y bajó el arma hasta que el venado quedara al descubierto, pero le tapaba la sachavaca.
Resulta que los animales no se movían del sitio, pues, parecían clavados en el suelo y lo único que hacían, era raspar la tierra. De pronto, el canto de la chicua, casi sobre la cabeza de Upshico, le asustó, haciéndole dar un pequeño salto, esto motivó que los animales quisieran correr, pero no podían moverse y no quitaban la vista del árbol. Esto llamó la atención a Upshico, y avanzó unos pasos hacia los animales y comprobó que éstos se asustaban, pero no podían correr, estaban como hipnotizados. Upshico comenzó a inquietarse y a sentir temor de algo desconocido que iba a ocurrir en cualquier momento. Al poco rato, vio que la sachavaca comenzó a dirigirse hacia la base del tronco, paso a paso y desapareció en un abrir y cerrar de ojos, como si la tierra se lo hubiera tragado, a continuación el venado siguió el mismo camino y desapareció igual al llegar al extremo del árbol caído, ni un grito, ni un quejido se escuchó. Upshico, decidió investigar y empezó a revisar el tronco, pero de lejos. Se detuvo un instante para observar bien y lo que vio los dejó paralizado de horror, sus piernas temblaban y estaba a punto de desmayarse, pues, lo que creía que era un árbol, no era otra cosa que un descomunal monstruo.
Era una horrorosa serpiente gigantesca con enormes ojos brillantes, que emitían rayos hipnotizantes, una enorme cabeza horrible con largas orejas bien paradas y puntiagudas, una boa monstruosa que parecía tenerla abierta como la entrada de un túnel. Esta criatura de la selva permanecía allí inmóvil, tal vez por largos años o siglos, alimentándose de toda clase de animales que tenían la desgracia de cruzarse en su camino, poniéndose al alcance de sus poderosos rayos hipnóticos de sus ojos. 
http://mpe-s1-p.mlstatic.com/22878-MPE20236725964_012015-C.jpg
Carlos Velásquez Sánchez


PREGUNTAS:

1.- ¿Qué significa “trochear”?
2.- ¿Qué es “chicua”?
3.- ¿Por qué los animales no podían moverse pese a que Upshico hacía bulla?

miércoles, 8 de julio de 2015






La selva peruana con su exuberante vegetación, encierra un sin número de misterios y peligros en la profundidad de sus bosques. Para los habitantes de este inmenso manto de verdor no hay secretos ocultos. En este mundo además de gran variedad de animales salvajes, existen también mitos y leyendas de seres mitológicos y fatídicos como el Chullachaqui, o también el espíritu de los pies deformes, llamado así porque se dice que tiene una pierna normal y la otra de cabra. Según los habitantes de la selva, esta extraña criatura siempre adopta la figura o la forma de una persona amiga conocida del pueblo, para engañar a la que va a ser su víctima y hacerle perder en la espesura de la enmarañada selva. Muchos pobladores aseguran que en muchas oportunidades han visto las huellas o pisadas desiguales impresos en el barro, mientras otros dicen que es un demonio que cuida la selva para que no penetren en ella. La única forma para descubrir la identidad verdadera de Chullachaqui es mirar a sus pies deformes. Consecuentemente, él tratará de esconderlos para que no vean que tiene uno de cabra. Al ser descubierto, el duende escapará a la selva.

https://elescorpionrojo.wordpress.com/2015/05/16
/el-chullachaqui-y-la-ayaymama/comment-page-1/
Cuenta la leyenda que en un poblado enclavado en lo profundo de la selva, en horas de la tarde un vecino del lugar llamado "Belisho" decidió ir al campo para ayudar a su padre quien se encontraba realizando la cosecha. Al estar en camino, improvisadamente se le presentó una persona igual a su padre y sin dejarlo avanzar le dijo; "He venido a esperarte, vamos sígueme". El hijo un poco sorprendido obedeció sin decir una sola palabra siguió caminando junto con su inesperado acompañante por un camino bastante ancho pero a medida que iban avanzando el camino se hacía cada vez más angosto. En ese trayecto sorpresivamente se detuvo y le dijo: "hasta aquí te he acompañado, tú te quedas y yo me voy”, y desapareció del lugar, riendo burlonamente. Recién entonces se dio cuenta que se encontraba perdido en un enorme bosque y por más que busco el camino para regresar a su casa no lo encontró. Desesperado ando por el monte llamando con voz en cuello a alguien que pudiera encontrarse cerca para que lo saque del lugar pero nadie respondió. Al darse cuenta sus familiares que no regresaba a casa, salieron en su busca y lo encontraron luego de cuatro días de intenso trajín. Al verlo se dieron con la sorpresa de que el hijo había perdido la razón. Una vez en su casa trataron de curarlo pero en vista de que no recobraba el conocimiento decidieron llevarlo a un curandero para que lo cure del mal que lo quejaba. 

HACER SUS COMENTARIOS Y RESPONDER A LAS PREGUNTAS:
1.- ¿Por qué se lo llama Chullachaqui?
2.- ¿Qué significa llamar "con voz en cuello"?